...continuación

El hambre nos acechaba y como buenos glotones terminamos en Pangoa chupando hasta la pata de gallina de la sopa (no lo volveremos hacer puajj, es como lamer el poto a un cuy).
Y entre risas y tontunas, no sabemos muy bien como terminamos tranformándonos en auténticos Nomachiguengas, para afrontar lo que la selva nos tenía preparados.

GRRRR...Preparados para ir en busca de los pistacos!

De nuevo volvíamos a la aventura; no sabíamos que llegar a la comunidad de Teddy (coordinador Ashaninka y no emparentado con ningún “osito amoroso”) iba a ser una auténtica prueba para los recién nacidos Nomachiguengas; Lluvias torrenciales, caminos embarrados, ríos que cruzar en lanchabarcos y todo ello vivido desde la parte de atrás de un jeep.
Estabamos en Selva Warner y no paramos de reírnos en todo el viaje, a pesar de estar bien mojaditos y terminar al día siguiente con algún que otro moratón.

Listos para embarcar, con coche inlcuido.

La comunidad de Teddy parecía sacada de un cuento del Amazonas, rodeada de montañas verdes en mitad de un valle, precioso.
Allí nos esperaban de nuevo los mas pequeños otra vez, con sus lápices bien afilados para comenzar otro nuevo concurso, en el que metimos a Celia y Pedro de jueces internacionales (menudo marrón).
Nos constó un poco explicar que es esto de tener derechos. Por un lado porque eran bilingües y algunos no nos terminaban de entender bien y por otro porque era un concepto bastante abstracto y no suelen estar acostumbrados a ellos.

¿Se estarán enterando de algo?

Nos gustó mucho poder conocer y convivir un poquito con esta Comunidad, que vive tan cerca de la naturaleza y que sigue luchando por mantener sus costumbres.

Haciendo la pelota a la profe

La vuelta a Satipo que parecía que iba a ser tranquila, se volvió toda otra aventura.
Veinte minutos antes de pasar por un tramo del camino este se derrumbo dejando completamente cortada la carretera.
Así que manos y pies a la obra!!! Nos tocó pringarnos hasta las cejas para sacar los pedrolos y alisar un poco el camino.
Aviso No acto para padres: hubo momentos de tensión!! No queremos comentar la altura del barranco que se encontraba en la verita del camino.
La única que no termino embarrada Celia, alias la Inmacula, la mas pita y lista. Podemos decir que se encargó mas de las maniobras de dirección que de ejecución (será jodia!)

Buscando la lentilla de Celia


Como comprenderéis la despedida y la vuelta fue dolorosa después del pedazo fin de semana aventuresco y divertido que pasamos todos.